Por qué la salud necesita artistas, y por qué el sector creativo debería mirar hacia las empresas de salud. Reflexiones, herramientas concretas y algunos consejos.
Hola! Un poco lejos de la fecha de publicación leí este artículo. Desde chica asisto a hospitales. Primero como paciente, ahora como médica, y una observación que hice desde aquellos primeros momentos fue que cómo podía ser que a los enfermos nos atendieran en lugares no sólo destruidos sino lúgubres y tristes. De a poco las salas pediátricas se fueron haciendo coloridas y hasta hay muestras en los centros de salud. En los cesacs trabajamos bastante estas cuestiones y es muy lindo que se hable del valor del arte desde el punto de vista terapéutico. Gracias por el artículo
Está edición de Pulmón Creativo conecta profundamente con algo que vivimos en carne propia en Barranquilla: el poder sanador de la cultura. El Carnaval no es solo una fiesta; es un ritual colectivo de liberación emocional, de conexión, de memoria y de identidad. Es un espacio donde lo creativo y lo comunitario se entrelazan para cuidar lo invisible: la salud mental, el sentido de pertenencia, la alegría de vivir.
En un mundo donde el sistema de salud enfrenta desgaste y desconexión humana, el arte aparece como remedio. Y no lo decimos solo por intuición: lo vemos cada año cuando un barrio entero se transforma, cuando un hacedor recupera su lugar en la historia, cuando la música le devuelve al cuerpo su dignidad.
Por eso creemos que el Carnaval también cuida. Que invertir en cultura no es un lujo, es una necesidad. Y que este puente entre salud y creatividad es urgente y transformador.
¡Hola Enrique! Qué inspiración leer esta edición de Pulmón Creativo. Me sentí muy identificada y quería contarte que en CABA existe BIOTICO, un proyecto que cruza arte, inclusión y bienestar. Trabajamos junto al CCRAI (Centro de Capacitación y Recursos de Apoyo para la Inclusión) en talleres de creación textil donde personas con discapacidad intelectual se convierten en docentes y artistas. A través de la revalorización de materiales descartados, fortalecemos habilidades manuales y expresivas, y promovemos bienestar emocional, vínculos, autoestima y reconexión con el entorno. Creemos, como decís, que la creatividad cuida, transforma y sana.
Además de nuestra colaboración actual con CCRAI, antes trabajamos 8 años con ALPAD, un taller protegido en Saavedra, hasta el cierre de la institución. En ese período desarrollamos una metodología propia para potenciar la motricidad fina y gruesa, así como la atención y la concentración, siempre de forma interdisciplinaria junto a profesionales de salud mental. BIOTICO ha sido distinguido con el Sello de Buen Diseño Argentino en dos ocasiones, obtuvo el primer premio en Fashion Digital Made en la pasarela AltaRoma y fui seleccionada para DAE Diseño Argentino Exponencial 2025.
¡Gracias por abrir estos espacios de conversación tan necesarios! Me encantaría que podamos cruzar caminos.
Hace unos años trabajé como periodista en el hospital más grande de mi ciudad. Allí hacíamos distintas actividades que vinculaban la creatividad y el arte con la salud.
Una de las que más recuerdo, por el impacto que causó, fue la muestra fotográfica que pusimos en el pasillo central que dirigía al área UCI-UTI.
Todas las fotografías habían sido tomadas por funcionarios del hospital, mostrando sus vivencias en sus distintas labores del día a día.
Tanto pacientes como personal de salud se quedaban por minutos observando antes de entrar a la Unidad de Paciente Crítico. No solo era una muestra de “imágenes bonitas”, era un recordatorio de que podemos humanizar la salud.
Tu artículo me hizo recordar eso con gran cariño. Hoy que trabajo en marketing, con una que otra marca del sector, tengo siempre en mente la conexión más allá de lo técnico que debemos reflejar con los pacientes.
El cruce entre arte y salud, siempre fue conveniente para la salud como industria. Partis de un punto de vista desde mi opinión demasiado condicionado, que invisibiliza cuestiones realmente urgentes en la frontera del arte y la salud: Este cruce entre salud y cultura, que hasta hace poco parecía improbable, hoy se vuelve urgente.
El cruce entre salud y cultura, lejos de parecer improbable, hace porlo menos 200 años es conveniente para la salud. Probablemente no hayas escuchado hablar del cruce entre arte y salud en el británico James Tilly Matthews, considerado el paciente cero de la psiquiatría, o si preferís consdierado el primer sobrevivivente de servicios de salud mental. Pero en ese cruce hay algo que ha muchos les incomoda, y es justamente una mirada política sobre el cruce entre salud y cultura, porque Matthes fue activista por la revolución francesa.
Si hay algo urgente en el cruce de la industria cultural con la industria de la salud, es devolver a sus autores o herederos las obras de arte que fueron robadas y clasificadas como art brut, marginal o psicopatológico. Muchos de estos artistas están muertos, viviendo en situación de calle, de discapacidad o de extrema vulnerabilidad. La urgencia es justamente reparar el daño que la industria de la salud, causó en miles de artistas. Invisibilzar parte de la historia, también es colonización cultural del arte y la salud. La batalla cultural está perdida, por lo cual no tiene sentido pelearla.
Hola! Un poco lejos de la fecha de publicación leí este artículo. Desde chica asisto a hospitales. Primero como paciente, ahora como médica, y una observación que hice desde aquellos primeros momentos fue que cómo podía ser que a los enfermos nos atendieran en lugares no sólo destruidos sino lúgubres y tristes. De a poco las salas pediátricas se fueron haciendo coloridas y hasta hay muestras en los centros de salud. En los cesacs trabajamos bastante estas cuestiones y es muy lindo que se hable del valor del arte desde el punto de vista terapéutico. Gracias por el artículo
¡Hola! Muchas gracias por leerlo y comentarlo. También por compartir tus experiencias.
Enrique.
Está edición de Pulmón Creativo conecta profundamente con algo que vivimos en carne propia en Barranquilla: el poder sanador de la cultura. El Carnaval no es solo una fiesta; es un ritual colectivo de liberación emocional, de conexión, de memoria y de identidad. Es un espacio donde lo creativo y lo comunitario se entrelazan para cuidar lo invisible: la salud mental, el sentido de pertenencia, la alegría de vivir.
En un mundo donde el sistema de salud enfrenta desgaste y desconexión humana, el arte aparece como remedio. Y no lo decimos solo por intuición: lo vemos cada año cuando un barrio entero se transforma, cuando un hacedor recupera su lugar en la historia, cuando la música le devuelve al cuerpo su dignidad.
Por eso creemos que el Carnaval también cuida. Que invertir en cultura no es un lujo, es una necesidad. Y que este puente entre salud y creatividad es urgente y transformador.
Juanjo, gracias por tu comentario. El Carnaval de Barranquilla ilustra extraordinariamente este puente entre el arte y la salud 👏🏽👏🏽👏🏽
https://elpais.com/america-futura/2025-04-28/el-tango-un-aliado-clave-en-la-rehabilitacion-del-parkinson-en-argentina.html
Gracias por el dato!
¡Hola Enrique! Qué inspiración leer esta edición de Pulmón Creativo. Me sentí muy identificada y quería contarte que en CABA existe BIOTICO, un proyecto que cruza arte, inclusión y bienestar. Trabajamos junto al CCRAI (Centro de Capacitación y Recursos de Apoyo para la Inclusión) en talleres de creación textil donde personas con discapacidad intelectual se convierten en docentes y artistas. A través de la revalorización de materiales descartados, fortalecemos habilidades manuales y expresivas, y promovemos bienestar emocional, vínculos, autoestima y reconexión con el entorno. Creemos, como decís, que la creatividad cuida, transforma y sana.
Además de nuestra colaboración actual con CCRAI, antes trabajamos 8 años con ALPAD, un taller protegido en Saavedra, hasta el cierre de la institución. En ese período desarrollamos una metodología propia para potenciar la motricidad fina y gruesa, así como la atención y la concentración, siempre de forma interdisciplinaria junto a profesionales de salud mental. BIOTICO ha sido distinguido con el Sello de Buen Diseño Argentino en dos ocasiones, obtuvo el primer premio en Fashion Digital Made en la pasarela AltaRoma y fui seleccionada para DAE Diseño Argentino Exponencial 2025.
¡Gracias por abrir estos espacios de conversación tan necesarios! Me encantaría que podamos cruzar caminos.
Un abrazo,
Jesica Pullo
Fundadora de BIOTICO https://www.biotico.ar/
Hace unos años trabajé como periodista en el hospital más grande de mi ciudad. Allí hacíamos distintas actividades que vinculaban la creatividad y el arte con la salud.
Una de las que más recuerdo, por el impacto que causó, fue la muestra fotográfica que pusimos en el pasillo central que dirigía al área UCI-UTI.
Todas las fotografías habían sido tomadas por funcionarios del hospital, mostrando sus vivencias en sus distintas labores del día a día.
Tanto pacientes como personal de salud se quedaban por minutos observando antes de entrar a la Unidad de Paciente Crítico. No solo era una muestra de “imágenes bonitas”, era un recordatorio de que podemos humanizar la salud.
Tu artículo me hizo recordar eso con gran cariño. Hoy que trabajo en marketing, con una que otra marca del sector, tengo siempre en mente la conexión más allá de lo técnico que debemos reflejar con los pacientes.
Hola Cata, gracias por compartir tu recuerdo!
Estimado Enrique,
El cruce entre arte y salud, siempre fue conveniente para la salud como industria. Partis de un punto de vista desde mi opinión demasiado condicionado, que invisibiliza cuestiones realmente urgentes en la frontera del arte y la salud: Este cruce entre salud y cultura, que hasta hace poco parecía improbable, hoy se vuelve urgente.
El cruce entre salud y cultura, lejos de parecer improbable, hace porlo menos 200 años es conveniente para la salud. Probablemente no hayas escuchado hablar del cruce entre arte y salud en el británico James Tilly Matthews, considerado el paciente cero de la psiquiatría, o si preferís consdierado el primer sobrevivivente de servicios de salud mental. Pero en ese cruce hay algo que ha muchos les incomoda, y es justamente una mirada política sobre el cruce entre salud y cultura, porque Matthes fue activista por la revolución francesa.
Si hay algo urgente en el cruce de la industria cultural con la industria de la salud, es devolver a sus autores o herederos las obras de arte que fueron robadas y clasificadas como art brut, marginal o psicopatológico. Muchos de estos artistas están muertos, viviendo en situación de calle, de discapacidad o de extrema vulnerabilidad. La urgencia es justamente reparar el daño que la industria de la salud, causó en miles de artistas. Invisibilzar parte de la historia, también es colonización cultural del arte y la salud. La batalla cultural está perdida, por lo cual no tiene sentido pelearla.